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Estudios realizados en hogares del país centrados en más de 13.000 niños y niñas, han mostrado que cerca del 90% de ellos están manifestando problemas relacionados con su salud mental a raíz de las condiciones de confinamiento y falta de interacción social propias de la actual coyuntura del COVID-19.
Expertos llaman la atención sobre la necesidad de conocer las señales que podrían presentarse en los niños, y que los adultos podrían reconocer para identificar si un menor manifiesta afectaciones causadas por el confinamiento y cómo actuar en consecuencia.
“Pídale a su niño que hable sobre cómo se siente. Sentirse deprimido, desesperanzado, ansioso o enojado pueden ser señales de que podría beneficiarse de apoyo adicional durante estos tiempos difíciles.” Indica un artículo de la organización Healthy Children.
En cuanto a la salud mental de los adolescentes, el estudio presenta una estimación alarmante en la que afirma, con base en los resultados, que el 66,7% de ellos ha experimentado por lo menos una adversidad relacionada con su salud mental durante la pandemia, y cerca del 50% de ellos ha experimentado más de una.
Los eventos que han sido más reiterativos en la vida de los jóvenes y que desembocan en las dolencias de salud mental a corto, mediano e incluso largo plazo que se han venido reportando, van desde el consumo de alcohol por parte del padre cabeza de familia con un 17%, pleitos familiares dentro del hogar en un 18%, dificultades económicas en un 22% y padres que han enfermado con un 24%.
“Uno de cada dos siente menos motivación para realizar actividades que normalmente disfruta.” Afirma un reporte de la UNICEF.
A nivel local, en Bogotá las solicitudes de consultas en psicología y en algunas de sus especialidades como psicoterapia individual y psicoterapia familiar, se han disparado en los últimos meses.
Así, los expertos en salud mental recomiendan mantener alejados a los menores de sucesos que desemboquen en conflictos dentro del hogar para mantener al margen el riesgo de desarrollar enfermedades mentales como ansiedad y depresión.
Mantener un ambiente de hogar sano en medio de la situación mundial por la pandemia también favorecerá el desempeño académico de los menores, pues se ha demostrado que en ambientes conflictivos tiende a verse afectado negativamente. En concreto, se menciona que un 42% de los menores entre 4 y 12 años han tenido dificultades académicas a raíz de las medidas para evitar la propagación del virus. Población que a su vez es la más afectada a nivel afectivo-emocional.